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¿Por qué la comida rápida se ve tan increíble en los anuncios, pero en la vida real no se ve tan bien? Pues hay una buena razón para ello. Los anunciantes quieren que sus productos realmente capturen tu atención, y que abras tu billetera. Así, los fotógrafos no tienen límites para hacer que los productos se vean irresistibles a ojos de sus consumidores.
Y, en el caso de la comida rápida, eso incluye usar elementos no comestibles para que esa hamburguesa se vea como una comida digna de un rey. Desafortunadamente, verás que no siempre obtienes lo que ves.
Comemos primero con nuestros ojos
No importa cómo quieran disimularlo, el trabajo de los publicitarios de la comida rápida es manipularte suavemente, o no tan suavemente, para que creas que te están vendiendo lo que quieres. Y qué mejor manera de hacerlo que engañando a tu sentido de la vista. No es un secreto que comemos primero con nuestros ojos.
La industria alimenticia gasta miles de millones de dólares cada año en estrategias de marketing para hacerte creer que estás comprando una comida saludable cuando, en verdad, es demasiado frecuente que ese no es el caso. Una de las maneras en la que lo hacen es adornarla para que se vea fresca. La verdad es que probablemente esa no es la mejor comida para tu salud. Sin embargo, los millennials de hoy son mejor conocidos como la “generación visual”. Así, gracias a los medios sociales, las imágenes de alimentos a menudo hablan más fuerte que las palabras.
Cuando tu boca se hace agua al ver un póster de comida rápida o un anuncio en las revistas, recuerda que no es que estés deseando esa grasosa hamburguesa. En cambio, lo que ves ha sido manipulado para apelar a tu sentido de la vista. Sí, te están engañando para quedarse con ese codiciado billete.
¿Qué tal un poco de betún de zapatos en tu hamburguesa?
Esas tentadoras marcas de parrilla en las hamburguesas de los anuncios probablemente han sido colocadas estratégicamente, usando el borde de una plancha o incluso delineador de ojos. Lo cierto es que los productos cárnicos más fotografiados no han sido cocinados, pues se marchitarían. En cambio, se agrega un poco de betún para zapatos o barniz para crear ese delicioso brillo a las carnes crudas. Sí, es bastante dudoso que veas marcas de parrilla en una carne cocida jugosa en tu hamburguesa “de la vida real”.
Aquí hay un poco de desodorante en tus ingredientes
Esos jugosos tomates y lechugas crocantes que ves en los anuncios son probablemente vegetales rociados con desodorante, para crear un efecto altamente brillante. Y un poco de glicerina hace maravillas para lograr esas gotas de humedad en la lechuga y los demás agregados.
¿Un poco de espuma de afeitar con tu malteada?
En lo que respecta a crear la perfecta foto de una malteada, a menudo verás una cuantiosa cantidad de crema batida por encima. Pero la verdad es que la crema batida se cae. En su lugar, los estilistas alimenticios usan espuma de afeitar para decorar esos batidos. Oh, sí, y ese tentador helado, bien, en verdad es puré de patatas coloreado. Se mantiene mucho mejor que el helado bajo las calientes luces del estudio fotográfico.
Caliente y fresco equivale a… ¿bolas de algodón?
Nada dice que la comida es fresca mejor que la imagen de un pan, una hamburguesa o unas patatas fritas liberando un poco de vapor. La mayoría de los alimentos no tiene el contenido de agua suficiente para producir tanto vapor y, si lo hiciera, desaparecería demasiado rápido. Además, simplemente no hay tiempo suficiente para seguir haciendo comida fresca a ese nivel. Es allí donde las bolas de algodón entran en juego.
Las bolas de algodón mojadas con agua y puestas en el microondas producen vapor suficiente por varios minutos. Se las coloca estratégicamente por detrás de los alimentos y bebidas, para dar esa impresión de que están liberando vapor, tan calientes y frescas. ¿Cuándo fue la última vez que desenvolviste una hamburguesa y viste vapor saliendo de ella?
Detrás de cámaras con McDonald’s
Para responder a la pregunta “¿Por qué los alimentos se ven tan diferentes en los anuncios de lo que son en la tienda?”. Hope Bagozzi, la Directora de Marketing de McDonald’s Canadá, nos lleva detrás de escena en una sesión fotográfica. Los secretos de la profesión hacen que la hamburguesa anunciada se vea tan diferente de la que compras en el restaurante.
“Definitivamente puedes ver una diferencia en el tamaño”, dice Bagozzi. “La caja en las que entregamos nuestras hamburguesas las mantienen calientes, lo que crea un pequeño efecto de vapor, y hacen que el pan se contraiga un poco”.
Ella sigue diciendo “La principal diferencia es que de hecho tomamos los ingredientes que normalmente quedan ocultos debajo del pan, y los llevamos al frente para que puedas verlos”.
El trabajo de un estilista alimenticio es crear un producto fotografiado que tiente a sus espectadores. En el caso de McDonald’s, esto significa pintura en aerosol y colorantes que mejoran los tonos de la hamburguesa, para hacerla ver más tentadora y fresca.
Mira, claro que los anunciantes quieren que sus productos se vean tan tentadores como sea posible. Pero la realidad es drásticamente diferente de los anuncios, y así no es difícil que nos sintamos engañados por las acciones publicitarias. Esta es una idea: ¿por qué mejor no consumimos aquello por lo que pagamos? ¡La comida fresca de hecho se ve y sabe mejor!
En resumen: nota que estos anuncios prometen más de lo que cumplen. La próxima vez que veas un anuncio que hace agua tu boca, recuerda que probablemente sea sólo aerosol para el cabello, glicerina, y betún de zapatos lo que está haciendo que ese alimento se vea tan bien.
— Katherine Marko
* El artículo de hoy ha sido republicado desde nuestros amigos de VivirSaludable.org. La fuente original del artículo está aquí.
