Copas de Huevo con Prosciutto

Por Cat Ebeling

co-autora de los best-sellers:  La Cocina Quema Grasas & Los Principales 101 Alimentos Que Combaten El Envejecimiento

¿Alguna vez has probado el prosciutto? Esta versión italiana del jamón no es dulce y no tiene ese sutil sabor de sirope que tiene el jamón. El prosciutto es de hecho un tipo de jamón italiano curado en seco con una mejor reputación que las versiones americanas del jamón y del tocino.

El prosciutto es parte de los “Productos Protegidos de Origen” (Denominación de Origen Controlada) de Europa lo que significa que, para ser un verdadero prosciutto, debe provenir de una región italiana en particular—similarmente a lo que sucede con el vino producido en Francia.

El prosciutto es un jamón crudo de alta calidad, con sal marina y aire que lo curan a lo largo de años. Eso es todo. No tiene azúcares, nitratos o nitritos, y no tiene ningún químico para su preservación. No tiene nada artificial. Esto significa que el prosciutto de hecho no es considerado como una ‘carne procesada’, sino como una carne seca.

Si sigues una dieta keto o Paleo, el prosciutto es la mejor opción, pues no tiene azúcares agregados y no tiene carbohidrato alguno.

El prosciutto es rebanado en rebanadas súper delgadas, repletas de sabor. Ciertamente no necesitas comer montones para disfrutar de su sabor o para sentirte satisfecho. Es por eso que el prosciutto hace tan deliciosa a esta receta—algo muy diferente de los tradicionales huevos con tocino o huevos con jamón regular.

Cuando comparas al prosciutto con el tocino, el prosciutto gana sin duda alguna. Es menor en calorías, menor en grasas, menor en azúcares y menor en sal—nunca se lo elabora con nitratos u otros químicos, ¡y tiene un ENORME sabor!

Ahora, hablemos de los huevos. Si no lo has notado hasta ahora, comprar huevos se ha hecho algo confuso—hay una industria de huevos de granja convencionales, lo que significa que las pobres gallinas son hacinadas en almacenes con luz artificial, inyectadas con antibióticos y hormonas, y alimentadas con granos repletos de pesticidas. A menudo tienen sus picos cortados para que no se picoteen unas a otras, y a menudo se enferman.

Por otro lado, están los huevos ‘free range’ (o ‘no enjaulados’) lo que significa que las gallinas básicamente son conservadas en un escenario más similar a una granja donde pueden tener una puertecilla que se eleva. No necesariamente salen al exterior, sino que simplemente no se las mantiene en jaulas. No necesariamente son más saludables. Se les administra rutinariamente antibióticos y también se las mantiene bajo la luz artificial. Se las alimenta con granos, a menudo rociados con glifosato Monsanto.

Un paso más arriba están los ‘huevos orgánicos’. Estos son de gallinas que sólo comen una alimentación orgánica, pero ten en cuenta que es una alimentación, y no su dieta natural. Los huevos orgánicos provienen de gallinas a las que sólo se ha administrado antibióticos en el caso de una infección. No se les agrega hormonas o drogas para la producción de los huevos orgánicos. Las gallinas que producen huevos orgánicos viven en un ambiente libre de jaulas y deben tener acceso al exterior, incluso si fuera un lote o un jardín pequeño.

Ahora también hay ‘huevos de pastura’, que no deben confundirse con los huevos ‘free-range’ o no enjaulados—una manera totalmente diferente de criar a las gallinas, ¡en la que notarás que los huevos se ven totalmente distintos también! Los huevos de pastura son los mejores que puedes conseguir, ¡a menos que críes tus propias gallinas! Las gallinas son omnívoras y gustan de atrapar picoteando bichos, gusanitos e insectos. Las gallinas criadas de pastura pueden andar libremente por campos ricos, de los que obtienen sus dietas naturales—aunque puede que se les haya dado alimento orgánico para suplementar sus dietas, también.

A menudo las gallinas de pastura están en pastizales o campos en los que pueden moverse libremente, y regularmente. Los huevos de pastura están llenos de grasas omega-3 y tienen yemas ricas en nutrientes. Los huevos de pastura tienen el doble de vitamina E, casi 40% más vitamina A, dos y medio veces más de grasas Omega 3 y menos grasas Omega 6, en comparación a los huevos de gallinas enjauladas.

Notarás que las yemas de profundo color amarillo-anaranjado son superiores, en sabor, en los huevos de pastura. ¡Bon Appétit!

Copas de Huevo con Prosciutto y Espinaca

Fáciles de hacer, y fácil limpiar después. No les agregues sal sino hasta después de probarlas. El prosciutto es bastante salado, así que tus copas de huevo puede que ya tengan la sal necesaria. Sirve 3-6, dependiendo del apetito.

Ingredientes

• Mantequilla para engrasar la sartén
• 6-8 delgadas rebanadas de prosciutto
• 1 taza de espinaca bebé o col (kale) tierna
• 6 huevos de pastura
• Pimienta negra recién molida
• 1 cucharada de cebollino o cebolla de verdeo picada

Preparación

• Precalienta el horno a 175°C. Engrasa una bandeja para 6 muffins con la mantequilla.
• Pon en cada espacio de la bandeja una rebanada delgada de prosciutto, intentando cubrir toda la superficie de la “taza” con el prosciutto, para formar un cuenco donde puedas cascar el huevo. Pon algunas horas de la col o de la espinaca por sobre el prosciutto.
• Casca un huevo en cada taza, y espolvorea con pimienta negra recién molida.
• Hornea hasta que la clara esté cocida pero la yema aún algo líquida, por unos 18-20 minutos, teniendo en cuenta que seguirán cocinándose un poco luego de retirarlas del horno.
• Retira del horno y corona cada huevo con una pizca de la cebolleta o de la cebolla de verdeo picada. Deja enfriar 1 minuto para que los huevos se afirmen lo suficiente como para poder desmoldar las copas.
• Usa una espátula delgada o un cuchillo de mantequilla para repasar con cuidado el borde de cada cuenquito. Lleva a un palto y sirve de inmediato. Pruébalos y agrega sal sólo si lo necesitas.

Referencias
http://www.brightonyourhealth.com/salt-and-time-why-prosciutto-isnt-really-a-processed-meat/
https://www.healthline.com/nutrition/pastured-vs-omega-3-vs-conventional-eggs